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Te encuentras en una situación que parece sacada de una pesadilla: ¿Qué hacer si la denunciante me acosa pero no me creen? Entiendo perfectamente esa sensación de impotencia y frustración. Muchos de mis clientes llegan a mi despacho desesperados, sintiéndose atrapados en un sistema que parece diseñado para creer automáticamente a quien denuncia primero. Te prometo que existen soluciones legales efectivas para protegerte. En este artículo, te mostraré paso a paso cómo documentar el acoso, qué pruebas reunir y cómo presentar tu caso para que sea tomado en serio por las autoridades.

La realidad invertida: cuando el denunciado se convierte en víctima

Durante mis años como abogado penalista, he observado un fenómeno preocupante: situaciones donde la persona que interpone una denuncia por violencia de género utiliza después el proceso judicial como herramienta de acoso contra el denunciado. Esta inversión de roles genera una indefensión especialmente dolorosa, ya que el sistema judicial parte de una presunción de credibilidad hacia la denunciante que puede dificultar que se tomen en serio las alegaciones de acoso por parte del denunciado.

El problema se agrava cuando existe un contexto de separación conflictiva o disputas por la custodia de hijos. En estos casos, la denuncia inicial puede formar parte de una estrategia más amplia para obtener ventajas en otros procedimientos judiciales paralelos.

¿Quieres saber por qué esto es tan importante? Porque ignorar este tipo de acoso puede tener consecuencias devastadoras para tu salud mental, tu reputación y tu situación legal a largo plazo.

¿Cómo identificar si estás siendo víctima de acoso por parte de la denunciante?

Antes de tomar medidas legales, es fundamental identificar y documentar los comportamientos que constituyen acoso. No todos los contactos o comunicaciones de la denunciante pueden considerarse acoso, especialmente si existen hijos en común o asuntos pendientes que requieren cierta comunicación.

Señales de acoso que debes documentar

  • Comunicaciones excesivas o intimidatorias: mensajes, llamadas o correos electrónicos reiterados sin justificación legítima.
  • Presencia inesperada: apariciones en tu lugar de trabajo, domicilio o lugares que frecuentas.
  • Manipulación del entorno social: difusión de información falsa entre amigos, familiares o compañeros de trabajo.
  • Uso de terceras personas para vigilarte o enviarte mensajes.
  • Amenazas veladas sobre nuevas denuncias o consecuencias legales.
  • Incumplimiento deliberado de las medidas judiciales establecidas para provocar tu reacción.

Aquí viene lo que nadie te cuenta: muchas veces, este tipo de acoso está diseñado específicamente para provocar una reacción que pueda ser utilizada como prueba en tu contra en el procedimiento principal. Mantener la calma y documentar meticulosamente cada incidente es tu mejor defensa.

Marco legal: ¿Qué dice la ley sobre el acoso inverso?

El ordenamiento jurídico español contempla mecanismos de protección frente al acoso, independientemente de quién lo ejerza. El hecho de que exista una denuncia previa por violencia de género no otorga inmunidad a la denunciante para realizar conductas constitutivas de acoso.

El artículo 172 ter del Código Penal tipifica el delito de stalking o acoso, estableciendo penas de prisión de tres meses a dos años o multa para quien acose a una persona llevando a cabo de forma insistente y reiterada conductas como vigilancia, contacto o aproximación no deseada, uso indebido de datos personales o atentados contra la libertad o el patrimonio.

Por su parte, el artículo 173.1 del Código Penal castiga a quien infligiere a otra persona un trato degradante, menoscabando gravemente su integridad moral, con penas de prisión de seis meses a dos años.

En mi opinión como abogado penalista especializado en violencia de género, uno de los principales obstáculos en estos casos es la tendencia de algunos operadores jurídicos a interpretar cualquier denuncia del acusado como una estrategia defensiva o una «contradenuncia» sin fundamento, en lugar de evaluarla objetivamente por sus propios méritos.

Pasos prácticos si la denunciante te acosa pero no te creen

Enfrentarse a una situación donde eres víctima de acoso por parte de quien te ha denunciado requiere una estrategia cuidadosa y bien documentada. Esto puede cambiar el rumbo de tu caso…

1. Documenta meticulosamente todo el acoso

  • Registro cronológico detallado: Anota fecha, hora, lugar y descripción de cada incidente.
  • Conserva todas las comunicaciones: Mensajes, correos electrónicos, notas o cartas.
  • Grabaciones legales: En España, puedes grabar conversaciones en las que participes sin necesidad de consentimiento de la otra parte (según jurisprudencia del Tribunal Supremo).
  • Testigos: Identifica personas que hayan presenciado los incidentes de acoso.
  • Informes médicos o psicológicos: Si el acoso ha afectado tu salud, obtén documentación profesional que lo acredite.

Recuerda que la calidad de la documentación es más importante que la cantidad. Un registro sistemático y objetivo tendrá más peso que alegaciones generales sin respaldo probatorio.

¿Te acusan falsamente y además te acosan? Claves legales que debes conocer

Cuando te enfrentas a una denuncia por violencia de género y, además, sufres acoso por parte de la denunciante, estás ante una situación jurídicamente compleja que requiere un enfoque estratégico en varios frentes.

La Ley Orgánica 1/2004 de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género establece un marco de protección reforzada para las víctimas, pero esto no significa que debas renunciar a tu derecho a defenderte del acoso. El artículo 24 de la Constitución Española garantiza la tutela judicial efectiva y la presunción de inocencia, derechos fundamentales que amparan tu posición.

Veamos por qué este detalle marca la diferencia: la existencia de una denuncia previa no suspende tus derechos fundamentales ni te convierte automáticamente en culpable. El sistema judicial debe evaluar cada caso por separado y con las garantías procesales correspondientes.

Estrategias legales efectivas

  1. Presentación de denuncia por acoso: Formaliza una denuncia específica por los hechos constitutivos de acoso, aportando todas las pruebas recopiladas.
  2. Solicitud de medidas cautelares recíprocas: Si existe una orden de alejamiento contra ti, puedes solicitar que se establezcan medidas similares para protegerte del acoso.
  3. Ampliación de tu declaración en el procedimiento principal: Informa al juzgado sobre la situación de acoso, ya que puede ser relevante para valorar la credibilidad de la denunciante.
  4. Recurso de reforma o apelación: Si tus alegaciones no son atendidas en primera instancia, no dudes en recurrir las resoluciones desfavorables.

La importancia de un abogado especializado cuando la denunciante te acosa

Enfrentarse simultáneamente a una acusación por violencia de género y a una situación de acoso por parte de la denunciante requiere una defensa legal especializada. No todos los abogados están familiarizados con las particularidades de estos casos «invertidos» donde el denunciado también es víctima.

Desde mi experiencia en este tipo de casos familiares relacionados con situaciones donde la denunciante acosa al denunciado pero no le creen, suelo recomendar que se busque un abogado con experiencia específica en violencia de género que haya trabajado tanto desde la perspectiva de la acusación como de la defensa. Esta visión completa del fenómeno permite diseñar estrategias más efectivas.

Un abogado especializado podrá:

  • Evaluar objetivamente la solidez de las pruebas tanto de la denuncia inicial como del acoso posterior.
  • Identificar patrones de manipulación procesal que puedan estar pasando desapercibidos.
  • Coordinar estrategias entre diferentes procedimientos (penal, familia, etc.).
  • Anticipar movimientos de la parte contraria basándose en la experiencia en casos similares.
  • Presentar los hechos de manera que maximice su credibilidad ante jueces y fiscales.

Cómo presentar tu caso para ser creído: técnicas efectivas

Uno de los mayores desafíos cuando eres víctima de acoso por parte de quien te ha denunciado es conseguir que tu versión sea tomada en serio. La credibilidad se construye a través de una combinación de factores:

Presentación objetiva de los hechos

Evita caer en la tentación de exagerar o dramatizar los hechos. La objetividad y precisión en la descripción de los incidentes aumenta significativamente tu credibilidad. Utiliza un lenguaje descriptivo y concreto, evitando juicios de valor o interpretaciones subjetivas.

Por ejemplo, en lugar de decir «me acosa constantemente», especifica: «Entre el 1 y el 15 de junio recibí 47 mensajes de texto a todas horas del día y noche, incluyendo amenazas veladas como ‘vas a perder todo lo que te importa'».

Coherencia narrativa

Tu relato debe mantener una coherencia interna y cronológica. Las contradicciones, aunque sean en detalles menores, pueden ser utilizadas para desacreditar tu testimonio completo. Antes de presentar una denuncia o declarar, repasa cuidadosamente tu narrativa para asegurarte de que es consistente.

Apoyo pericial

En casos complejos, puede ser útil contar con informes periciales que respalden tu versión:

  • Peritajes psicológicos que evalúen el impacto del acoso en tu salud mental.
  • Análisis forenses de dispositivos electrónicos que certifiquen la autenticidad de mensajes o llamadas.
  • Informes de detectives privados (siempre que actúen dentro de la legalidad) que documenten conductas de acoso presencial.

Aspectos psicológicos: cómo manejar el estrés cuando no te creen

Ser víctima de acoso y no ser creído genera un impacto psicológico significativo que puede afectar tu capacidad para defenderte adecuadamente. La combinación de estrés, ansiedad, sensación de impotencia y miedo puede resultar abrumadora.

Algunas estrategias para gestionar esta situación incluyen:

  • Buscar apoyo psicológico profesional especializado en victimología o trauma.
  • Mantener una red de apoyo social de personas que conozcan tu situación y puedan ofrecerte respaldo emocional.
  • Practicar técnicas de autocuidado como ejercicio físico, meditación o actividades que te ayuden a reducir el estrés.
  • Establecer límites claros en tu exposición a noticias o información sobre casos similares que puedan aumentar tu ansiedad.
  • Documentar también el impacto emocional del acoso, lo que puede servir como prueba adicional.

Recuerda que cuidar tu salud mental no es un lujo sino una necesidad para poder afrontar adecuadamente el proceso legal.

Cuando hay hijos en común: protegerlos del conflicto

La situación se vuelve especialmente delicada cuando existen hijos en común. El acoso puede manifestarse a través de manipulaciones relacionadas con el régimen de visitas, la comunicación sobre los menores o incluso intentos de alienación parental.

Medidas para proteger a los menores

  • Mantén a los niños al margen del conflicto legal. Evita hablar negativamente del otro progenitor o discutir sobre el caso en su presencia.
  • Documenta cualquier intento de utilizar a los menores como medio de acoso o control.
  • Considera solicitar que las entregas y recogidas se realicen en un Punto de Encuentro Familiar si existe tensión durante estos momentos.
  • Comunícate sobre asuntos relacionados con los hijos únicamente por medios que queden registrados (correo electrónico, aplicaciones de coparentalidad).
  • Valora la posibilidad de solicitar una evaluación psicosocial que determine el impacto del conflicto en los menores.

El artículo 94 del Código Civil, tras su modificación por la Ley 8/2021, establece que no procederá el establecimiento de un régimen de visitas respecto al progenitor que esté incurso en un proceso penal por atentar contra la vida, integridad física, libertad, integridad moral o libertad e indemnidad sexual del otro progenitor o de los hijos. Sin embargo, esto no debe interpretarse automáticamente como una prohibición absoluta de contacto, especialmente si no existen indicios fundados de riesgo para los menores.

Recursos legales específicos si la denunciante te acosa pero no te creen

Además de la denuncia directa por acoso, existen otros recursos legales que puedes utilizar cuando la denunciante te acosa pero no te creen:

Solicitud de archivo de la causa principal

Si puedes demostrar que la denuncia original forma parte de un patrón de acoso o manipulación procesal, puedes solicitar el sobreseimiento de la causa por artículo 641.1 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (no resultar debidamente justificada la perpetración del delito) o por el artículo 637.2 (el hecho no ser constitutivo de delito).

Denuncia por acusación y denuncia falsa

El artículo 456 del Código Penal tipifica el delito de acusación y denuncia falsa. Sin embargo, es importante tener en cuenta que este delito solo puede perseguirse tras sentencia firme o auto firme de sobreseimiento en el procedimiento principal. Además, requiere demostrar no solo que los hechos denunciados eran falsos, sino también que la denunciante conocía esta falsedad.

Reclamación por daños y perjuicios

El artículo 1902 del Código Civil establece que «el que por acción u omisión causa daño a otro, interviniendo culpa o negligencia, está obligado a reparar el daño causado». Si puedes demostrar que has sufrido daños materiales o morales como consecuencia del acoso, puedes reclamar una indemnización.

Querella por calumnias e injurias

Si la denunciante ha difundido información falsa sobre ti que daña tu honor o reputación, puedes presentar una querella por los delitos de calumnias (artículo 205 CP) o injurias (artículo 208 CP).

Recurso legal Base jurídica Requisitos principales
Denuncia por acoso (stalking) Art. 172 ter CP Conducta insistente y reiterada que altere gravemente tu vida cotidiana
Denuncia por acoso moral Art. 173.1 CP Trato degradante que menoscabe gravemente tu integridad moral
Denuncia por acusación falsa Art. 456 CP Sentencia o auto firme favorable previo; conocimiento de la falsedad
Querella por calumnias Art. 205 CP Imputación falsa de un delito con conocimiento de su falsedad
Reclamación civil Art. 1902 CC Demostración del daño causado y relación causal

Casos de éxito: cuando se logró demostrar el acoso de la denunciante

Para ilustrar que es posible revertir estas situaciones, comparto algunos casos reales (con nombres ficticios) en los que hemos logrado que se reconozca el acoso por parte de la denunciante:

El caso de Miguel: acoso a través de denuncias reiteradas

Miguel fue denunciado por su expareja por supuestas amenazas. Tras ser absuelto, su ex presentó cinco denuncias más en un periodo de seis meses, todas por hechos similares y sin aportar pruebas concretas. Además, le enviaba mensajes provocadores intentando obtener respuestas que pudieran comprometerle.

Estrategia: Documentamos meticulosamente el patrón de denuncias, presentamos todos los mensajes recibidos y solicitamos un informe pericial psicológico que evidenció el impacto del acoso procesal en Miguel.

Resultado: El juzgado reconoció la existencia de acoso procesal, dictó una orden de alejamiento a favor de Miguel y remitió testimonio a fiscalía para investigar posible delito de acusación falsa.

El caso de Laura: manipulación a través de los hijos

Laura fue denunciada por su exmarido por supuesto maltrato psicológico. Durante el proceso, él utilizaba las entregas y recogidas de los hijos para provocar discusiones, grababa selectivamente solo las respuestas de Laura y la amenazaba con «hundir su carrera profesional».

Estrategia: Instalamos una aplicación legal de grabación de llamadas, documentamos todos los intercambios durante las entregas de los menores y solicitamos que estas se realizaran en un Punto de Encuentro Familiar con supervisión profesional.

Resultado: Las grabaciones completas demostraron la manipulación, y los informes del Punto de Encuentro confirmaron el comportamiento provocador. El juzgado archivó la causa contra Laura y estableció medidas para protegerla del acoso.

Conclusión: Reconstruyendo tu vida cuando la denunciante te acosa

Enfrentarse a una situación donde la denunciante te acosa pero no te creen requiere paciencia, estrategia y apoyo profesional adecuado. A lo largo de este artículo, hemos visto que, aunque el camino puede ser difícil, existen herramientas legales efectivas para protegerte y hacer valer tus derechos.

La clave está en la documentación meticulosa, la presentación objetiva de los hechos y contar con asesoramiento legal especializado que comprenda las complejidades de estos casos. No estás solo en este proceso, y con la estrategia adecuada, es posible revertir la situación.

Recuerda que cada caso es único, y las estrategias deben adaptarse a tus circunstancias específicas. Lo más importante es actuar con prudencia, siguiendo siempre el consejo de profesionales y manteniendo la calma incluso en los momentos más difíciles.

¿Cómo puede ayudarte AbogadoPenal.Madrid en casos donde la denunciante te acosa?

En AbogadoPenal.Madrid, bajo mi dirección como abogado especializado en violencia de género, ofrecemos un enfoque integral para casos donde la persona denunciada sufre acoso por parte de la denunciante:

  • Evaluación inicial exhaustiva de tu situación, analizando tanto la denuncia original como las conductas de acoso.
  • Diseño de estrategia de documentación personalizada para tu caso específico.
  • Presentación de denuncias por acoso con la fundamentación jurídica adecuada.
  • Solicitud de medidas cautelares para protegerte mientras se tramita el procedimiento.
  • Coordinación con otros procedimientos (familia, civil) que puedan estar relacionados.
  • Defensa integral tanto en el procedimiento principal como en las acciones por acoso.
  • Acompañamiento durante todo el proceso, incluyendo preparación para declaraciones y juicios.
  • Recursos contra resoluciones desfavorables, agotando todas las vías legales disponibles.

Nuestro objetivo es no solo defenderte de las acusaciones injustas, sino también protegerte activamente del acoso y ayudarte a recuperar el control de tu vida.

Preguntas frecuentes sobre qué hacer si la denunciante te acosa pero no te creen

¿Qué hago si me acusan de violencia de género y además la denunciante me acosa pero no me creen?

Lo primero es mantener la calma y comenzar inmediatamente a documentar todos los incidentes de acoso. Contrata a un abogado especializado en violencia de género que tenga experiencia en casos similares. Presenta una denuncia específica por el acoso, aportando todas las pruebas recopiladas. Es fundamental separar claramente tu defensa frente a la acusación inicial de tu posición como víctima de acoso, aunque ambas situaciones estén relacionadas.

¿Cómo puedo protegerme legalmente si la persona que me ha denunciado me sigue acosando?

Puedes solicitar medidas cautelares específicas para protegerte del acoso, incluso si ya existen medidas en tu contra. Estas pueden incluir órdenes de alejamiento recíprocas, prohibición de comunicación o establecimiento de puntos de encuentro supervisados si hay hijos en común. También es recomendable solicitar que todas las comunicaciones necesarias se realicen a través de abogados o mediante plataformas que registren los intercambios.

¿Qué ocurre si ambas partes se acusan mutuamente de acoso en un caso de violencia de género?

Cuando existen acusaciones cruzadas, los juzgados deben evaluar cada una por separado, basándose en las pruebas aportadas. Es fundamental que cada parte documente objetivamente los hechos que denuncia. El juzgado puede acordar medidas de protección para ambas partes si considera que existen indicios suficientes en ambos sentidos. En algunos casos, puede ordenarse una evaluación psicosocial para determinar la dinámica real de la relación y la credibilidad de las versiones contrapuestas.